CHANSONS POUR UNE ÎLE DÉSERTE – 10 – CANCIONES PARA UNA ISLA DESIERTA

DE MIS PAGOS – LOS HUANCA HUA

Au tout debut des annés 60, j’étais accro à la radio. J’écoutais principalement la radio municipale de Buenos Aires qui transmettait depuis le théâtre Colon. Vers 6 heures du soir, si ma mémoire est bonne, on pouvait y entendre un groupe qui était en train de révolutionner de fond en comble la musique folklorique argentine, les Huanca Hua.

Il est vrai que leurs arrangements polyphoniques, d’une grande virtuosité, faisaient souffler un vent de modernité, inédit jusqu’alors, sur la musique traditionnelle argentine.

Le groupe était composé, lorsque je le découvris, de trois frères Farías Gómez, Chango, Pedro et Marian, qui avait remplacé Hernán Figueroa Reyes, Carlos del Franco Terrero et Guillermo Urien.

Ce renouveau qu’apportaient les Huanca Hua, ce qui signifie en quechua les Enfants de la Musique, avait des racines profondément enfouies dans la terre du nord du pays, plus précisément de la province de Santiago del Estero.

https://www.youtube.com/watch?v=k_bq37NXvNc

De mis pagos, la chanson que j’ai choisie est, à mon avis, une synthèse de cette modernité dont les fondements se trouvent dans la culture populaire la plus pure.  

J’aurais bien pu en choisir d’autres, Huachi torito, Samba de los mineros ou le magnifique arrangement pour cinq voix de la Misa criolla, d’Ariel Ramírez,  que réalisa Chango Farías Gómez.

Vers la fin des années 60, il ne restait qu’un Farías Gómez sur le navire Huanca Hua. Chango avait fondé le Grupo Vocal Argentino, dont Marian faisait aussi partie.

Sa vie durant, Chango Farías Gómez ne cessa d’innover et de créer de nouveaux groupes, dont Múicos Populares Argentinos, à son retour dd son exil en Espagne, au temps de la dictatue des années 70, et La Manija, tourné vers les racines africaines de la musique argentine,

A comienzos de los años 60 yo era fanático de radio. Escuchaba principalmente Radio Municipal de Buenos Aires que trasmitía desde el teatro Colón. A eso de las 6 de la tarde, si mi memoria es buena, se podía escuchar u grupo que revolucionaba completamente la música folklórica argentina, los Huanca Hua.

Es verdad que sus arreglos polifónicos, de un gran virtuosismo, hacían soplar un viento de modernismo, inédito hasta entonces, sobre la música tradicional argentina.

El grupo estaba compuesto, cuando lo descubrí, por tres hermanos Farías Gómez, el Chango, Pedro y Marian, que había remplazado a Hernán Figueroa Reyes, Carlos del Franco Terrero y Guillermo Urien.

Esta renovación que traían los Huanca Hua, lo que significa en quechua los Hijos de la Música, tenía raíces profundamente hundidas en la tierra del norte del país, más precisamente de la provincia  de Santiago del Estero.

https://www.youtube.com/watch?v=k_bq37NXvNc

De mis pagos, la canción que elegí es, en mi opinión, una síntesis de esta modernidad cuyos fundamentos se encuentran en la cultura popular más pura.

Bien habría podido elegir otras, Huachi torito, Samba de los mineros o el magnífico arreglo para cinco voces  le magnifique de la Misa criolla, de Ariel Ramírez,  que realizó el Chango Farías Gómez.

A fines de los años 60, sólo quedaba un Farías Gómez en la nave Huanca Hua. El  Chango había fundado el  Grupo Vocal Argentino, del que Marian también formaba parte.

Duante toda su vida el  Chango Farías Gómez no dejó de innovar y de crear nuevos grupos, entre los cuales  Múicos Populares Argentinos, a su regreso de su exilio en España, en tiempos de la dictadura de los años 70, y  La Manija, vuelto hacia las raíces africanas de la música argentina.